Los Sitios Paleontológicos de las Cuencas Pisco y Camaná en la Lista Indicativa del Patrimonio Mundial de la Convención de UNESCO de 1972 como bien natural bajo el criterio C (viii) en el año 2019. Comprenden un bien natural especial correspondiente a la subcategoría “testimonio de la vida” por representar un ejemplo del proceso evolutivo de especies marinas, constituyendo uno de los yacimientos paleontológicos marinos más diversos en América del Sur, que abarca así mismo un excepcionalmente amplio rango cronológico, desde el Eoceno medio al Plioceno superior, inusual en bienes paleontológicos inscritos en la Lista del Patrimonio Mundial. La particular fauna marina está compuesta por numerosas especies de vertebrados (peces, reptiles, aves y mamíferos) e invertebrados, (moluscos, crustáceos, anélidos y equinodermos), así como microfósiles, muchas de ellas endémicas y migratorias, además de presentar singular fauna terrestre adaptada a las condiciones costeras.